Cristalina y brillante como la luz de la luna, proyecta un tenue blanco frío, como el nenúfar que brilla bajo la luz de la luna, blanco y suave. Su fina textura evoca sentimientos puros y la belleza del milenio, enterneciendo esta parte del mundo.
El gris gélido se impregna de frescura, y la elegancia azul grisácea que se desvanece gradualmente no resulta tan aburrida ni monótona. La simplicidad moteada del pequeño detalle se conserva, decorando el espacio con una atmósfera generosa.
Nuestras marcas están certificadas y se producen de manera justa a partir de mármol, granito, porcelana, basalto, cuarzo y todas las demás piedras naturales y compuestas adecuadas...